miércoles, 26 de noviembre de 2008

Maria Callas




Maria Anna Cecilia Sophia Kalogeropoulos (Nueva York, 2 de diciembre de 1923 - París, 16 de septiembre de 1977), más conocida por el nombre artístico de Maria Callas fue una soprano de origen griego, considerada como la más famosa cantante de ópera del periodo de posguerra.
Callas combinaba una impecable técnica del bel canto con un gran talento dramático, cualidades que le hicieron la más famosa actriz-cantante de aquella época. Era extraordinariamente versátil, ya que su repertorio iba desde la ópera seria clásica, como La Vestale de Gaspare Spontini, hasta las óperas de Giuseppe Verdi, o Giacomo Puccini. Sus estudios de la coloratura le permitieron cantar papeles tan diferentes, pero este esfuerzo aceleró el deterioro de su voz y le acarreó múltiples críticas.





Era hija de Evangelia Dimitriadis y George Kalogeropoulos, una pareja de emigrantes griegos que llegaron a Estados Unidos en agosto de 1923, asentando su domicilio en la ciudad de Nueva York. En 1929 George Kalogeropoulos, farmacéutico de profesión, abrió un negocio familiar en un barrio griego de Manhattan y por la complejidad del apellido lo cambió por Callas.
Tras la separación de sus padres, María viajó a Grecia en 1937 con su madre y hermana, volviendo a adoptar su apellido original Kalogeropoulos. Comenzó su formación en el Conservatorio Nacional de Atenas, y para inscribirse tuvo que falsear la edad ya que no tenía los 16 años mínimos. Estudió con la soprano Maria Trivella, y después coloratura con Elvira de Hidalgo.
La relación entre María y su madre era difícil. La madre presionaba a María con sus clases, solicitando a sus profesores que le informasen de todos sus avances; y por otro lado comparaba a María con su otra hija, calificándola de «gorda», poco agraciada y únicamente atractiva por su voz. Años después, María confesaría a la prensa que su madre la apoyó solamente para tener algún sustento económico y que si bien admiraba su fortaleza y agradecía ese apoyo, nunca se había sentido querida por ella.
El debut de María fue en 1941, en el Teatro Lírico Nacional de Atenas con la opereta Boccaccio. El primer éxito lo tendría en 1942 con Tosca en la Ópera de Atenas. Pronto cantó Fidelio, Tiefland y Cavalleria Rusticana, también en Atenas. En 1944, durante los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial, las fuerzas ocupantes pierden el control de Grecia y la flota británica llega al puerto de El Pireo. Maria Kalogeropoulos decide volver a los Estados Unidos para encontrarse con su padre.
Sus éxitos no fueron muchos hasta que la quiso escuchar Edward Johnson, el director general del Metropolitan Opera House, quien le ofreció inmediatamente los principales papeles en dos producciones en las temporadas de 1946-1947: Fidelio de Ludwig van Beethoven, y Madama Butterfly de Giacomo Puccini. Para sorpresa de Johnson, María rechazó los papeles: no quería cantar Fidelio en inglés, y consideraba que no era apropiada para el papel de Butterfly.
Encontró trabajo en 1946, pero continuó practicando con vigor para perfeccionar su técnica. Tomó como agente a Eddie Bagarozy y aceptó cantar la ópera Turandot en Chicago en enero de 1947 con un reparto de cantantes europeos célebres, en una compañía que fue fundada por Bagarozy y Ottavio Scotto, un empresario italiano.
María Callas mostró tener un carácter muy fuerte y determinante en sus decisiones, que se evidenciaría en el trato con su madre y más tarde con Aristóteles Onassis. Su voz en los pianos era bellísima, pero en ciertas notas tenía un timbre metálico que no sabía anular con técnica, como Katia Ricarelli. Como Di Stefano, fue víctima de la absurda idea de ser una «soprano absoluta». La falta de técnica, el abuso de sus agudos y el cantar en tesituras que no eran la suya causaron que perdiera la voz a una edad relativamente temprana.

1 comentario:

Unknown dijo...

minha avó conheceu maria callas em N.Y. em 1960. um abraço!!